¿Hay hemorragia? Haz esto de inmediato
Cuando ocurre un suceso imprevisto como un accidente, desastre natural, caída, etc se pueden producir lesiones en el cuerpo en donde se rompen venas, arterias o vasos capilares del herido y se forma una hemorragia.
Se determina hemorragia a la pérdida de sangre continuada de un paciente, en algunos casos estás lesiones pueden ser mortales si no se detiene a tiempo el sangrado, por eso, es importante saber identificarlas y contar con algunas técnicas para ayudar a una persona en caso de emergencias.
En este artículo te compartiremos una guía básica para actuar en caso de una emergencia, aunque, el primer consejo o paso a seguir será siempre: Contactar a un servicio de urgencias que pueda atender la situación con ayuda prehospitalaria idónea.
Identifica la hemorragia
Las lesiones se pueden clasificar de la siguiente manera:
Hemorragia interna:
La más peligrosa porque pasa desapercibida y los pacientes pueden correr grave peligro, es común que después de una caída desde altura o una fuerte contusión se presente este tipo de pérdida de sangre, pueden ser:
Venosas o arteriales:
Se percibe una disminución drástica de la temperatura del paciente, se nota pálido y el abdomen se pone rígido y con alta sensibilidad, pérdida de la conciencia.

¿Qué hacer en caso de una hemorragia interna?
Lo más importante es encontrar la manera de trasladar al paciente a un centro de salud, también puedes aplicar ciertos aspectos.
Cubrir con una manta al paciente para que no pierda la temperatura corporal.
Elevar los pies por encima de la cabeza.
Girar la cabeza a un lado (Solo si no se sospecha de una lesión de cuello).
Mantener una conversación con el paciente y verificar su estado mental y de respiración.
También existen hemorragias internas a nivel capilar y se observan como hematomas debajo de la piel, en estos casos lo ideal es poner compresas frías sobre el lugar afectado.
Hemorragia externa
Es la pérdida de sangre que ocurre hacía afuera del cuerpo por medio de una herida. Las lesiones pueden ser: Arterial, venosa o capilar.
La mejor manera de identificar la gravedad de la hemorragia externa es con los siguientes parámetros:
Lesión arterial: Expulsión a presión y color rojo intenso o vivo.
Lesión venosa: Color de la sangre rojo oscuro, salida del cuerpo lenta pero continua.
Capilares: La salida es a través de pequeños puntos de la herida y el color es rojo.
¿Qué hacer frente a una hemorragia externa?
Aplicar presión sobre la herida con una gasa o paño limpio (Esto en caso de que no se observe ningún objeto dentro de la herida.)
Si hay un objeto dentro de la herida no se debe sacar, ni mover.

Elevar la zona afectada, si es una extremidad, de esta manera se disminuye la distribución de sangre a la zona.
Si disminuye el flujo de sangre se puede colocar una compresa fría sobre la gasa o paño.
Nunca quitar la gasa, venda o paño de la herida, ya que la coagulación de la sangre ayuda a frenar el flujo, si se quita el proceso comenzará de nuevo haciendo que el paciente pierda mucha sangre.
Hemorragia nasal
Ante una situación como esta lo más apropiado es apretar ambas fosas nasales con los dedos índice y pulgar, ubicar la cabeza en una posición recta ligeramente inclinada hacía adelante.
En caso de que la hemorragia continúe se puede optar por colocar una gasa pequeña humedecida con agua limpia en la fosa nasal que sangra.